lunes, 27 de febrero de 2012

No todo lo que brilla es oro

Como bien dice el título, no todo lo que brilla es oro. Lo que parecía un día perfecto para hacer un pesquerón de buenos ejemplares, sobretodo de doradas, se convirtió en un rezo constante por salvarnos de la porra con alguna cabezona aunque fuese pequeña, pues pese al inmejorable estado del mar y la variedad de cebo expuesta, el pescado se nos resignaba a entrar a los anzuelos. Quizá el problema estuvo en que nos cegamos con lanzar lejos, pero aun sabiéndolo y lanzando varias veces cerca, incluso muy cerca, no era nuestro día.

Partíamos Ismael y yo hacia la playa a eso de las 4 del mediodía, con grandes expectativas y unos ánimos increíbles. Llegamos al pesquero y vimos que muchos pescadores ya habían tomado posiciones, por lo que ampliamos terreno para que no faltase sitio para Alejandro y Juanito, que vendrían más tarde. Con el sol todavía sobre nuestras cabezas teníamos las cañas lanzadas con buenas carnadas. Y, mientras esperábamos a los compañeros nos echamos unas risas y sacamos algunas fotos hasta que vinieron.







Avanzaba la noche y nada, los cebos en su mayoría intactos, solo Juanito sacó una oblada la cual utilizamos para intentar sacar calavereta, pero la única calavereta que salió fue la que sacó Ismael clavada en el anzuelo jajaja. Finalmente Ismael sacó este sargo que ronda los 350g:


Pero pasaba la noche y solo algunas mabras, y muy de vez en cuando. Nos sentábamos a comentar la jugada, si eran los cebos, la distancia... Nada, no había manera alguna de saberlo, pues los del grupo de al lado nuestro se estaban hinchando a mabras!



Al rato, Alejandro avisó de que Juanito tenía una caña totalmente destensada y con el carrete frenado a tope, y al ir a clavar... Si! Dorada! lo tenía más claro que el agua, por los cabezazos que pegaba no paraba de decir que era dorada. Y en efecto, dorada de 900g para fuera.


Aguanté un poco más, pero solo Alejandro tocó dos mabrotes más y la cosa paraba, por lo que recogí junto a Ismael y de vuelta a casa. Aún no se el resultado final de la noche para Alejandro y Juan, ya me contarán!

martes, 21 de febrero de 2012

Primera del año!

Por fin la tan ansiada dorada! Todo el invierno buscando a este escurridizo espárido y hemos tenido que llegar a mediados de febrero para sacarlo!

Llevaba días en busca de la dorada, pero con los temporales y de más, no había quien pudiese salir a pescar en condiciones (lo cual no significa que no lo intentase, vaya porrones me he llevado!). Pero para el fin de semana las predicciones daban buena mar y buen tiempo, por lo que no iba a perder la oportunidad!

El viernes me fue imposible salir, pero ya el sábado a mediodía se me presentó la oportunidad de ir a buscarlas. De 12 a 5 ni picada, no comía ni el cangrejo. Por suerte, pude disfrutar de una compañía de lujo (va por ti cariño jaja) y de un día espectacular, vamos, que parecía mayo!




Tras esta porra y con el ánimo un poco bajo, se gestaba por el foro otra quedada el domingo por la noche, a la cual no podía faltar. 

Finalmente los asistentes fuimos: Alejandro, Juanito, Ismael y un servidor. El tiempo era perfecto, el mar más aún, y la compañía ni te cuento! Ismael y yo llegamos tarde al pesquero, pero, pese a los intentos de Juanito por desesperarme haciéndome creer que ya llevaban un saco de pescado, llegamos tranquilos y teniendo las cosas claras: montaje a utilizar, cebo a emplear y a fondo! 

La noche, más que ser recordada por las doradas, bien podría ser recordada por los cruces de líneas... Al parecer teníamos el punto de mira mal puesto (sobretodo Alejandro y yo) y no parábamos de cruzar.

Se empezaron a tocar alguna mabra y obladas con flotters, pero esta vez si que no cedí y ni hablar de flotters! El cangrejo no comía y las picadas cesaron, cuando, hablando yo con Ismael escucho a Alejandro comentando que no podía con la pieza que estaba cobrando, que le costaba más de lo normal. "Ya lleva algo gordo" le comenté a Ismael. Nos quedamos todos muy desperdigados cuando me giro y veo a Alejandro aún con la misma pieza, la caña totalmente paralela al mar y aún si sacar nada. Me acerqué y alumbré al agua... Premio! Ahí estaba la cabezona, sin agua pero aún luchando! (mira si se quedó sin agua que el compañero se tuvo que meter a sacarla)






1.300kg que nos dieron una alegría tremenda a todos los que estábamos allí. Automáticamente, tras este acontecimiento, cargamos de nuevo los anzuelos y a fondo! Pero mis cañas seguían sin actividad, por lo que me fui a cenar con el resto del grupo, y no me levanté hasta un buen rato después, cuando decidí revisar de nuevo las cañas y, para mi sorpresa, una estaba medio destensada, así que tensé, tiré y.. Nada, no lleva nada... no tenía ni la linterna en la cabeza (ni tenía previsto ponérmela porque no llevaba nada) cuando la caña me pega dos cabezazos. Sigo recogiendo, ya faltaba poco para que entrase la cola de rata y empieza la fiesta! Al ver que tiraba ya en serio avisé al resto, que alumbraron rápidamente al agua, pero para entonces ya estaba casi fuera... Dorada!! otra dorada!!



570g de bicho, no mucho, pero que junto a la otra, dan comienzo a la temporada 2012.

El resultado final para mi fue el siguiente, pero ninguno de los presentes hizo porra esa noche, todos tocamos escama y todos disfrutamos con las capturas de las dos cabezonas de esa noche. Un saludo a todos!