Tras una semanita fuera de España, volví con ganas de arrasar con todo a pié de playa, pero desgraciadamente, las condiciones meteorológicas adversas pudieron conmigo. Pero antes de que eso ocurriese, obtuve un premio que bien me merece las porras restantes esta semana.
El miércoles amanecía en Alcocebre, y al mirar por la ventana lo vi, el mar, ¡Cuanta falta me hacía verlo! Sin pensarlo, cargué con todo el equipo y me planté en la playa de enfrente de mis apartamentos, aprovechando que aún quedaba algo de arena (raro, ya que suele ser todo piedra). No es una zona que destaque por sus capturas, de hecho, se la da por muerta, pero habiendo salido arena y sol (aunque un viento sur notable) por qué no probar?
El mar no estaba muy limpio, pero aguantaba sin ser chocolate. El viento no me dejaba ver bien las picadas, en caso de haberlas, pero lo peor era que la ola no paraba de mojar las picas y humedecer donde estaban clavadas, lo cual daba inestabilidad... y en efecto, dando un paseo con mi novia mientras pasaba el rato, veo que una caña estaba casi caída hacia la dirección donde soplaba el viento. Voy corriendo a ver qué había pasado y veo como el puntero no paraba de marcar una bonita picada!
Este fue el resultado:
Una doradita de 700g que me alegró el día, y por fin he grabado un vídeo sacando pescado! jajaja
El resto de la semana el mar se ensució y el viento y la lluvia hicieron casi imposible la pesca, digo casi porque cabezón de mi, seguí tratando de pescar algo, pero no pudo ser.
Espero que la siguiente foto que cuelgue sea de alguna que pase del kilo, y sacada en el concurso del foro! jaja
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