Ya se han terminado los exámenes y puedo dedicarle tiempo a la pesca!
Pues bien, ayer me fui a echar un rato delante de mis apartamentos y por fin salió el pescado! El resultado fueron dos doradas, una que pasaba por poco el medio kilo y otra que apuraba los 450g, y un llobarrete que venía tragado.
A las 23:30h pensaba ya en recoger y largarme, así que le llevé la dorada que llevaba y el llobarro a mi abuela, que vive justo al lado del pesquero (del mar a la mesa! jajaja) y cuando volví premio, caña destensada! Esta vez si que me dio pelea la dorada, al llegar a la orilla, iba del morro y peleó bien, fue el rato más divertido de la noche.
Finalmente, los dorados hicieron acto de presencia y recogí.
Hoy más!
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